ENTREVISTAS


Mucho se habla de que el diseño venezolano está tomando un nuevo auge y volando con alas propias. De esa camada de nuevos artistas sale Ramón Nuñez, diseñador radicado en Maracay (Aragua) y fiel creyente del auto-aprendizaje, trabajador freelance que por los momentos no posee fotos personales. 
El diseño ha sido influencia necesaria y siempre protagonista en su vida: “Les diría que diseño desde que tuve conciencia de que podía crear algo distinto, me volví un adicto del lápiz y la hoja, empecé a verlo como un elemento fundamental en mi vida. El artista además de transmitir su mensaje sin importar la reacción del espectador, también posee algo muy importante, que es la identidad. Si el diseñador logra mezclar esto tan importante en sus proyectos, estaría expresando un detalle de su vida en cada trabajo”. Palabras propias que definen la línea clara entre el diseño y el punto artístico en sus obras, pintando mucho en blanco y negro e inspirándose en grandes personajes venezolanos como: Simón Diaz o Gustavo Dudamel y en algunos extranjeros como: Clint Eastwood o Jack Nickolson. Una mezcla bien opuesta de personajes y técnicas.

¿Crees que el diseño puede cambiar la relación de la humanidad con su entorno?

Por supuesto, el diseño al igual que el arte hoy en día se ha convertido en una herramienta gigante para transmitir mensajes e inquietudes de la sociedad. El diseñador no es solo un tipo sentado frente a una PC haciendo tarjetas o pendones, el verdadero diseñador logra transmitir un mensaje elaborado de la manera más funcional posible, ya que posee los conocimientos necesarios para captar la atención del receptor.

¿Internet te ha ayudado a publicitar tu trabajo?

Bastante, hay millones de ilustradores allá afuera que no han visto mi trabajo y yo tampoco he visto el de ellos, que mejor que la internet para llegarles directamente, no necesito pasaporte ni equipaje, llego dejo un mensaje, si es bien apreciado habrá sido un éxito y viceversa.

¿Proyecto más reciente? 

La Teoría de los Opuestos, es un proyecto personal que combina dos temáticas distintas en un solo arte, es una manera de expresar irónicamente la realidad. La intención es crear un espacio en la mente del observador, que imagine por un segundo un mundo alterno donde lo vertical generalmente está horizontal, un rol de papeles bastante interesante para el que esté cansado del estereotipo común. 

Artista que se confiesa siempre estar variando:“Me gusta que las piezas sean en común ilustraciones a mano, pero siempre compuestas por elementos nuevos, intrigantes y misteriosos para el ojo critico, no me gusta lo obvio, un trabajo que te haga pensar me parece mucho más interesante”.