JUAN BERNARDO GONZÁLEZ
WHISKEY FILMS
VENEZUELA
Juan Bernardo González se inicia en el mundo audiovisual publicitario de la mano de la agencia Leo Burnett (Caracas, Venezuela) realizando una pasantía por allá en los años 90. Después de ocho semanas fue contratado como asistente de producción y trabajó allí por cinco años. Su paso por la agencia fue su escuela, aprendió mucho de la producción, lo que lo llevó, luego de un tiempo, a formar parte de una de las casas productoras de mayor repercusión en el mundo publicitario nacional, D-Linea Films. Luego se va a Nexus, de Fernando Duprat, allí sigue aprendiendo hasta montar su propia compañia, Prime Time. Su empeño y dedicación por el mundo audiovisual lo llevan a formar Whiskey Films, que nace de la invitación de Arturo Pereyra, que tenía un proyecto de formar en México una casa productora. “Yo vivía en Venezuela en ese momento y tenía mi propia compañía, Prime Time, en la cual estuve por 11 años. A la vez, y junto a Andrés Colantoni, también proyectamos abrir la productora en Colombia, por lo cual acordamos hacer la fusión y arrancar Whiskey Films con base en México y sede en otros tres países".
Al cabo de algún tiempo, el volumen de trabajo y las exigencias de los clientes, sumado a la inseguridad en Caracas hacen que decida emigrar y buscar seguridad en otras fronteras. “La seguridad, cuando tienes hijos es primordial, tienes que pensar en ellos y en su futuro, y para tener futuro hay que tener vida primero, y eso es muy complicado hoy en día en Venezuela. Hablo de mi familia, porque yo sigo viajando a Venezuela varias veces al año”.
¿Cómo se establece Whiskey Films en el exterior?
Nacimos en Ciudad de México, Caracas y Bogotá, una vez que Arturo Pereyra terminó sus compromisos en EE.UU, con quien lo representaba, tomamos la decisión de abrir la oficina en Miami, y desde mediados del año pasado la mudamos a Los Ángeles, luego gracias a un importante cliente, decidimos abrir en Panamá. Después vinieron Ecuador y Chile. Ecuador por la necesidad de nuestros clientes regionales por la nueva ley de contenidos que implementaron en ese país, similar a la de Venezuela, y Chile porque necesitábamos tener un pie en el sur, sobre todo por la parte de servicios de producción que damos a las otras productoras de Latinoamérica, EE.UU y Europa. Chile tiene una industria importante, además de locaciones espectaculares. Por último llega Sao Paulo, en Brasil, que también nace de las necesidades de nuestros clientes regionales y poder consolidar nuestra presencia en la región.
¿Cómo describirías el mercado publicitario en Venezuela?
Está muy difícil, la crisis en la que está sumergida Venezuela hace que todo sea muy cuesta arriba, el volumen de trabajo bajó considerablemente, hay pocos clientes invirtiendo, la inflación lleva ajustes cada tres meses, lo cual, complica las proyecciones de los clientes y sus presupuestos. En cuanto a la creatividad seguimos teniendo gente muy buena en Venezuela que sigue apostando a hacer cosas diferentes, los cuales aplaudo y te hacen sentir orgulloso. Dos leones en Cannes en los últimos dos años lo demuestran, pero hasta que la crisis se supere, es cuando veremos realmente muchos más proyectos como estos, y más apuestas de parte de los clientes.
¿Qué tipo de publicidad te gusta?
Soy fan del humor, de esos comerciales que te sacan una sonrisa.
¿Alguna pieza audiovisual qué quisieras realizar?
Una serie de TV, estamos trabajando duro para concretar algo este año.
¿Los premios hacen ganar clientes?
No lo creo, los premios dan prestigio, pero no creo que ganes clientes con ellos, menos cuando estamos atravesando una transición mundial sobre la manera de comunicar y la manera de llegar a las personas fuera de las vías tradicionales. Los clientes están comenzando a apostar a nuevos medios y formas, por lo que los proyectos tienen menos recursos que antes. Considero que los clientes terminan comprando nuevas propuestas de realización a buenos costos.
¿En qué país es más fácil producir?
Pues depende, si hablamos de facilidad en el sentido de tener muchas opciones de equipos, personal, locaciones y facilidad en los procesos, México sería un gran candidato.
¿Cuál es la clave para lograr la excelencia?
Auto exigirme más y más, siempre pensar que se puede hacer mejor y no quedarme conforme con las cosas.
¿Producir hoy en día es igual que hace 20 años?
No, hace 20 años todo era mucho más artesanal, el personal técnico era de cuatro personas hoy es de 15. Además de toda la tecnología que hoy tenemos hace las cosas más fáciles en los procesos de pre-producción, pero a su vez eso también nos hizo perder un poco la calidad de vida ¿no? El valor del tiempo… en todo caso no sé si es mejor o peor, solo sé que es diferente.
¿Algún hobby preferido?
La playa.
¿Regresarías a Venezuela?
¡Claro! Venezuela es mi país, donde nací y además donde me dieron mi primera oportunidad, eso no se olvida, eso siempre está adentro. Por ahora México me brinda unas posibilidades profesionales de desarrollo en mi carrera que lamentablemente Venezuela no me puede dar, pero mi corazón siempre está ahí y por eso sigo en contacto permanente con nuestra oficina de Caracas.
Hombre soñador, proactivo, que debe su experiencia a lo realizado y aprendido en Venezuela y que ha logrado llevar a Whiskey Films a ser reconocida en gran parte del mundo como una casa productora de primera línea. Le gusta viajar con un libro en la mano, sigue su camino, llega, se va, lo buscan, monta proyectos, delega, confía, y todo con la finalidad de tener una compañía acorde a los nuevos tiempos y a las nuevas formas de comunicación.
Más info : www.whiskeyfilms.com